Con interminables playas de arena blanca, marismas saladas, acantilados escarpados y bosques de pinos, Hiddensee invita a sentirse bien; además, la isla del mar Báltico ofrece galerías, museos, lecturas y conciertos.

Hiddensee, situado al oeste de Rügen en el Mar Báltico, tiene una superficie de casi 19 kilómetros cuadrados. El "Söte Länneken" (el pequeño y dulce país), como parte del Parque Nacional Vorpommersche Boddenlandschaft, inspira a sus huéspedes con su encantadora y variada naturaleza. Esto también es apreciado por muchos escritores y artistas que han dado forma a la isla durante décadas: Hiddensee se presenta como una isla de cultura con una rica oferta de eventos. Las familias exploran la isla a pie, en bicicleta o a caballo. Típico de Hiddensee es el espino amarillo: crece en todas partes y sabe especialmente bien en pasteles o como jugo.

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