Cualquiera que viaje 550 kilómetros desde Bamberg a Bayreuth y hasta la República Checa por la Ruta de la Porcelana, siguiendo los pasos del oro blanco, descubre más de 300 años de historia de la porcelana.

A lo largo de la Ruta de la Porcelana a través de los encantadores paisajes del Steigerwald, el Alto Valle del Meno, tierra de Coburg, el Bosque de Franconia, el Fichtelgebirge y el Bosque del Alto Palatinado, el visitante puede experimentar muchas cosas hermosas en el verdadero sentido de la palabra. Una y otra vez se revela el orgulloso pasado de la porcelana local: Museos, fábricas de marcas mundialmente famosas, tiendas especializadas y fábricas muestran toda la gama de este noble material. En el punto de venta de la fábrica se pueden comprar muchas piezas hermosas de la vajilla diaria, desde diseños nobles de lujo hasta piezas únicas pintadas a mano.

En muchos lugares, los fabricantes ofrecen visitas guiadas a las fábricas y proporcionan información sobre cómo se forma, cuece, pinta, decora y esmalta la porcelana desde la materia prima hasta el producto final. Se pueden obtener conocimientos detallados desde los orígenes de las primeras cerámicas hasta los objetos del estilo de vida del siglo XXI en el Museo Industrial Europeo de Porcelana y Cerámica Técnica Porzellanikon en Selb.

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