¿Qué tiene Berlín que no tengan el resto de ciudades del mundo? En primer lugar, los propios berlineses, que con su tosco pero entrañable encanto infunden a la ciudad esta atmósfera tan auténticamente berlinesa. Y, cómo no, un prácticamente increíble sinfín de lugares de interés en los que se refleja el dinamismo y el espíritu de la época, así como los grandes acontecimientos históricos y dramáticos del siglo XX.