Alturas inmensas, densos bosques, claros arroyos y lagos circulares, fragantes prados y bonitos pueblos... bajo esta bonita superficie, enormes fuerzas siguen hirviendo en el Eifel volcánico hoy en día.

El fuego y el agua han dado forma al Eifel volcánico, con unos 350 volcanes pequeños y grandes, maars, flujos de lava e innumerables manantiales de minerales y de dióxido de carbono. Las areniscas, los arrecifes tropicales y los poderosos depósitos marinos cuentan una historia aún más antigua de la tierra. Todo esto hace del Eifel volcánico un valioso patrimonio natural: ha sido designado un Geoparque Europeo, parte de la Red Mundial de Geoparques apoyada por la UNESCO. Mientras que los geomuseos explican los fenómenos científicos, algunas excursiones en bicicleta y a pie conducen a los tesoros de este fascinante paisaje.

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